Puñal en la espalda     Me duelen los huesos, mi sangre helada queda Crujen al caminar, de mis ojos brota hielo Mis manos tiemblan, todo cae, todo muere Enemigo soterrado, oculto en mi apego   Mi espalda acostumbrada a doblegarse Al recibir golpes de madero, no intuyo Que enemigos tenía, no los vio acercarse Como saber que venían, con puñal dispuesto   El ahogo en mis pulmones me quita   vida Mi corazón lento,   desea detenerse Mi alma no conoce la piedad, ¿para qué?   Nubes grises acompañan mi caminar Desde un día que mi Rosa dejo de existir Hace tantos años, el puñal estaba listo   jaz 5-09-2017 http://hablemosinpena.blogspot.com.co/